Avsnitt
-
“Me produce una gran satisfacción ver una vieja en el mercado tarareando una música mía. Una vez venía bastante enojado con todos estos inconvenientes que tiene la vida, y un changuito pasó en bicicleta, silbando la Zamba del pañuelo. Entonces lo paré y le pregunté qué es lo que silba: -No sé; me gusta y por eso lo silbo-, me contestó.”
Si el Cuchi hacía jazz, ese jazz estaba colmado de paisajes de baguala. De hecho el Gustavo Leguizamón hacía silencio en bagualas, por eso cuando se dice que él era autodidacta, corresponde decir que el Cuchi fue al folklore salteño lo que Sarmiento a la literatura, porque don Gustavo supo hacer universal asuntos de querencias.
¿Será qué el Cuchi, andaba en busca de las leyes de la zamba, de los artículos de la vidala, de la jurisprudencia de la chacarera? ¿Será por eso que Gustavo Leguizamón estudió abogacía, será que soñaba con promulgar la ley de los machados, los contratos del minero con el vino, el amparo de los amantes ante la aurora? -
¿Qué mapa puede brindar la geografía exacta de un campo desnudo en el recuerdo de un puestero? ¿Qué GPS consigue indicar el camino que el arriero desandaba en las noches sin lunas? ¿Qué diccionario alcanza a definir el alba como claridad que lo hace el silencio del tambero?
Los ecos de los oficios perdidos retumban en la cultura popular, cultura que no es otra cosa que la biografía de sus hombres y mujeres.
Hay hombres de campo que tienen corazón de tapera.
Locución: S. M. Tovarich
Idea y Guión: Pedro Patzer
Edición Artística: Fernando Salvatori
Producción: Fabiana Álvarez – Alejandro Carosella
Actor Invitado: Oscar Naya
Dirección Artística: Marcelo Simón -
Saknas det avsnitt?
-
Hay artistas que consagran su vida a contar y cantar su pueblo. Artistas que comprenden que la memoria que se construye hoy, es la identidad de mañana.
Orlando Vera Cruz, entendió su misión y descifró el llamado de su tierra, tanto es así que decidió cambiar su nombre de Orlando Pais por el nombre de su pequeño país, el de “Santa Fe de la Vera Cruz”
Orlando Vera Cruz nos enseña todas las pequeñas “Santa fes” latentes en la gran Santa Fe, la Santa Fe de la Pampa, la Santa Fe del monte, la Santa Fe del Gaucho y la Santa Fe de los tamberos.
Locución: S. M. Tovarich – Guillermo Chaves
Idea y Guión: Pedro Patzer
Edición Artística: Fernando Salvatori
Producción: Fabiana Álvarez – Alejandro Carosella
Actor Invitado: Oscar Naya
Dirección Artística: Marcelo Simón -
Cuando San Francisco de Asís renunció a las riquezas materiales del mundo, aprendió el lenguaje de los pájaros.
Cuando Cervantes fue encerrado en un calabozo, comenzó a soñar el Quijote, personaje que no se dejaba engañar por las trampas de la realidad, y en vez de un irreductible molino, encontraba a un feroz gigante.
Martín Fierro se hizo poema cantando su dolor y el Rey Midas comprendió su auténtica pobreza cuando todo lo que tocaba comenzó a transformarse en oro.
Romildo Risso comprendió que el sonido que hacían los ejes de su carreta, era la otra música, la compañera de esos caminos sin nombres.
Yupanqui hizo de los versos de Risso una de esas milongas de las que nos ayudan a descubrir el fuego.
En los momentos de mayor oscuridad, los grandes espíritus vuelven a ser el primer humano que descubre el fuego.
Cada vez que Pugliese era detenido por su ideología, su orquesta tocaba con claveles sobre su piano.
Sixto Palavecino vivía en el monte santiagueño, no tenía plata para comprar su violín, entonces con las partes de una mesa vieja construyó su primer sacha violín.
A la provincia de La Pampa le cortaron el Río Atuel. Todo el oeste de la provincia se hizo desierto. Sin embargo, los pampeanos de esa adversidad hicieron cultura, y fundaron el cancionero de los ríos.
Locución: S. M. Tovarich
Idea y Guión: Pedro Patzer
Edición Artística: Fernando Salvatori
Producción: Fabiana Álvarez – Alejandro Carosella
Actor Invitado: Oscar Naya
Dirección Artística: Marcelo Simón -
Locución: Stella Maris Tovarich
Edición Artística: Fernando Salvatori
Producción: Alejandro Carosella y Fabiana Álvarez
Guión: Pedro Patzer